
La navegación por la web es sencilla, con un menú en la parte superior que muestra la posibilidad de elegir entre lugar, tiempo, tipo de artículo o institución como categorías. La verdad es que es divertido observar lo que ha sucedido desde una línea temporal que comienza 8000 años antes de Cristo.
La Biblioteca Digital Mundial fue desarrollada por un equipo de la Biblioteca del Congreso de los EE.UU., con colaboraciones de instituciones asociadas de muchos países; el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, las Ciencias y la Cultura (UNESCO); y el apoyo financiero de varias empresas y fundaciones privadas (entre los que se encuentran todopoderosos conocidos como Google o Apple). Además se puede ver, en este listado, los socios, entre los que se incluyen las bibliotecas de las Universidades de Yale y Carolina del Sur, la Biblioteca de Alejandría, la Biblioteca Británica o, también por cercanía, la Biblioteca Nacional de España.
Es un lugar genial para navegar donde se pueden ver mapas antiguos o manuscritos como si estuvieran en la mano. Todo buen investigador debe tener en cuenta este material que pertenece a todos.